Reseña: La chica del tren, de Paula Hawkins.
Ya estamos a miércoles y, después
de dos semanas de estrés y adaptación, es el día de hacer los deberes en
Palabras que cuentan. He decidido que éste será el día de publicación para
darle al bloc (POR FIN) un poco de estabilidad y lógica. Hoy quería compartir
mi opinión (o más bien mi amor incondicional) por La chica del tren, de Paula Hawkins. Era una de mis reseñas
pendientes. Al menos tiene algo bueno dejar abandonado el blog durante eones,
que tienes material de sobra.
Rachel coge el mismo tren cada mañana. Sabe que cada día se detiene en
un semáforo rojo y que desde ahí verá los jardines traseros de una hilera de
casas. En una de estas casas vive una pareja que la Rachel no puede evitar
mirar cada vez. Hasta los ha bautizado, como si los conociera: son Jess y
Jason. A ella le parece que tienen una vida perfecta. Ojalá ella pudiera ser
igual de feliz que ellos. Hasta que un día ve una escena que la deja de piedra.
Dura sólo un minuto, porque el tren vuelve a ponerse en marcha enseguida; pero
ha sido suficiente. De repente todo ha cambiado. Ahora Rachel tiene la
oportunidad de entrar en unas vidas que hasta ese momento había mirado de
lejos, y la piensa dejar escapar. Se ha acabado ser solo la chica del tren.
Desde que lo leí no puedo evitar
con un poco de recelo a mis compañeros de trayecto. Lo peor de todo es que en
los trenes siempre encuentras toda una fauna de personajes peculiares que no
ayudan a controlar la imaginación.
Durante toda la novela tuve la
impresión de que la protagonista no era agua clara, que escondía un secreto
terrible. Rachel se encuentra en plena decadencia. Atormentada por una antigua
relación de la que no puede pasar página, la única manera que encuentra de
olvidar sus problemas es refugiarse en el alcohol. Eso la convierte en una
persona desagradable y deforma su personalidad hasta límites grotescos. Según
Stephen King “la narradora es absolutamente perfecta” y estoy totalmente de
acuerdo. Es de esos personajes que despiertan en ti sentimientos enfrentados.
Ahora la quieres, ahora la odias. Bueno, en mi caso la odié más de lo que la
quise. Pero eso solo consiguió que me gustara mucho más como personaje.
El libro me atrapó totalmente y se
adueñó de mi vida. Solo podía pensar en él cuando no estaba leyendo, haciendo
elucubraciones e intentando averiguar de qué iba toda la historia. Lo mejor fue
una sensación de malestar que se me metió dentro y la sensación, igual que
Rachel, que mis sentimientos y la realidad de lo que está pasando no se
corresponden. No es de esos libros que se solucionan en un momento y de repente
todo cobra sentido. Poco a poco puedes ir atando cabos y acabar por descubrir
el secreto. Pero eso no le quita nada de intriga y te da una sensación muy
gratificante cuando se van confirmando todas tus sospechas. Con esto tampoco
quiero dar a entender que el libro sea previsible. Porque no lo es en absoluto.
Pero tampoco es gratuito ni incongruente.
Además, llego a mí en el momento
adecuado, porque hacía tiempo que estaba un poco desmotivada y no acababa de
encontrar qué era lo que me apetecía leer. Así que tenía todos los elementos
para convertirse en una de las mejores lecturas del año para mí.
El libro se ha traducido ya a 46
idiomas y ha vendido más de 8.000.000 de ejemplares en todo el mundo, ¡lo que
es una pasada! Además, es el libro que más ejemplares ha vendido más ejemplares
en un periodo más corto de tiempo en los EUA. No está mal como referencia y no
me sorprende nada. Si todavía no lo habéis leído: ¡hacedlo! ¡Dejaos atrapar por
los fantasmas de Rachel!
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarEstoy totalmente deacuerdo contigo! No sabes si odias a Rachel, te da pena, quieres ayudarla o simplemente la quieres con sus cosas, porque no puedes parar de leer las cosas que le pasan. Un personaje muy bien construido. Estaría bien ver si la peli le hace justicia... estas cosas normalmente me dan miedo!
ResponderEliminarMe pasaba exactamente lo mismo, y cuando vi el cartel con Emily Blunt pense WTF?? No me había imaginado a Rachel así para nada... Pero después de ver la peli la verdad que me quedé bastante convencida. Acabé viendo a Rachel en su cara.
Eliminar¡Un abrazo Tina!